si a tu mejilla me acerco…
Qué sueño inmenso me llena,
qué dulce mi muerte en tu amor,
estoy tranquila….
Qué mística alegría,
qué alarmante pereza el separar tu mano
de la mía
Qué ritmo tan rítmico,
qué pausas tan silenciosas,
Qué cristalinas las cuerdas de tu boca,
cuando tus besos me tocan
Qué tranquilos tus ojos…
que al mirarme se posan.
Qué recuerdos los de una vez..
y los de siempre que tendré…
Es amor dulce y franco, es claro y bello a la vez
Ahora, duerme en tus pestañas claras
la sombra de mis besos
Besaré tu cuello por eternidades,
se unirá mi frente a la tuya, para poder encontrarte
Con estas palabras yo te regalo un secreto
Te quiero
La poeta se casó con el poeto, y en vez de tener un niño tuvieron un soneto
ResponderEliminarGloria Fuertes